Queridas y queridos compis…
Imagino vuestra impaciencia e inquietud, durante estos últimos meses, al
abrir cada día la página de MCEP y ver que aun no se había abierto el plazo al
40 Congreso del MCEP…
Pero hoy llegado el día.
Los hados y las hadas del MCEP (y algunas horas de angustias) han querido y
hecho posible que YA lo puedas hacer…
Pero es URGENTE que nos lo digas YA… (“Sí, como siempre”- piensas., quizás, mientras lo lees)
Pero esta vez es de verdad, porque tenemos a las personas de
la Residencia bastante inquietas, impacientes… y van preguntando cada poco (casi
cada día) “¿Cuántas personas van
inscritas?”… y un pequeño carraspeo suena en nuestra gargantas por
respuesta…
Por eso, y por mucho más… dinos que vienes.
Un 40 Congreso es un número redondo (“Tan redondo como cualquier otro” diría alguien que conocemos
mucho), pero lo queremos hacer más redondo todavía, y para eso os necesitamos,
nos necesitamos: tu cara, tu sonrisa, tus ideas, tus palabras, tu silencio, tu
mirada, tus gestos, tus guiños, tu escucha, tu experiencia, tu ilusión, tu
inquietud, tu curiosidad, tu abrazo, tu aplauso, tu crítica, tu visión…tu…. Nos
hacen falta para seguir construyendo esa escuela que soñamos y que sólo podemos
y sabemos hacer junt@s... Y que la mayoría de quienes nos gobiernan y bastantes
de quienes nos rodean, están en el
empeño de hundirla.
Me acuerdo (tengo más de 40) de uno de los primeros
programas de la tele, el de la señorita Herta Frankel… que decía en un programa
infantil…”Te veo a ti Carmen, a ti, Paco,
a ti Ana….” Y, aunque no oí nunca mi nombre, me vino esta imagen a mi cabeza, y mis deseos, cuando os imaginaba en
el 40 Congreso.: las caras y los nombres
de quienes pasamos por los congresos una,
dos, tres,… y hasta 40 veces.
También hay en mi deseo/sueño de este 40 Congreso, caras y nombres que
“hace 40 años”, no estaban en ningún lugar, y quizás en ningún proyecto: caras
nuevas, caras recientes, caras curiosas, caras aprendices, caras con otras
vivencias, con nuevas visiones del mundo, con energía renovadas (y renovables)…
o quizás sí estaban por el mundo y no habían encontrado razones suficientes
para asistir, o tenían algún impedimento personal, profesional…
Os voy a contar algunas de las razones para ir a este
Congreso:
§
Para soñar
§
Para despertar
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Para reír
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Para intercambiar
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Para compartir
§
Para aprender
§
Para enseñar
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Para conocer
§
Para buscar
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Para encontrar
§
Para reeencontrar
§
Para olvidar
§
Para recordar
§
Para charlas
§
Para escuchar
§
Para debatir
§
Para construir
§
Para cargar
§
Para descargar
§
Para crecer
§
Para pintar
§
Para pasear
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Para cuidar-me-te-nos-os
§
Para abrazar-te, os-nos
§
Para crear
§
Para creer
§
Para
inventar
§
Para volver
§
Para ir
§
Para empezar
§
Para seguir
§
Para llenarme
§
Para vaciarme
§
Para descubrir
§
Para seguir caminando
§
Para empezar a caminar
§
Para conoceros…
Y, así la lista de razones sería interminable… y, como
creo que la carta no lo tiene que
ser…Unas pequeñas instrucciones:
- Abre la página, coge la hoja, y …
- Ante la duda… apúntate
- Si hoy no puedes terminar el proceso, nos puedes decir que vienes y que en unos días nos mandas las cositas
- Y… si tienes tiempo y ganas, recuerda a algún compi de tus tierras que alguna vez paseo por el MCEP y dile que nos encantaría volver a verla, verle…
- O, a ese compi del cole, del barrio, de la familia o de lo que sea, que tú sabes que tiene ganas de soñar y de hacer otra escuela, y a quien nos encantaría conocer…
¡¡¡ANDA, VENTE¡¡¡
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